En tiempos donde la conservación de los alimentos es un problema significativo, los expertos estiman que, a nivel global, los desperdicios alimentarios cuestan más de 990 mil millones de dólares por año. Sin embargo, detrás de escena pasan más cosas que nunca para conservar los alimentos frescos. Muchos no son conscientes de los complejos sistemas que mueven los alimentos de forma segura del agricultor al consumidor, pero Copeland lo tiene muy claro. Después de todo, impulsamos muchas de las tecnologías que lo hacen posible.